La causa principal de las alergias a los gatos es una glicoproteína conocida como Fel D1, que es producida por las glándulas sebáceas debajo de la piel y, en menor grado, está presente en la saliva de gato.
La proteína Fel D 1 es bastante pegajosa, por lo que se adhiere fácilmente a la ropa y la piel, e incluso se puede transferir con bastante facilidad a lugares públicos donde no están presentes gatos.
Un gato desprende constantemente partículas diminutas de caspa (copos de piel) en el medio ambiente, y cuando se acicalan, transfieren saliva al pelo, que luego se cae alrededor de la casa y produce alergias a las personas susceptibles.
Las personas con alergias tienen un sistema inmune más sensible. Sus cuerpos confunden cosas inofensivas, como la caspa de gato, con invasores peligrosos y los atacan como lo harían con bacterias o virus. Los síntomas de la alergia son los efectos secundarios de como su cuerpo actúa sobre el alérgeno o el desencadenante.
¿Cuales son los síntomas de las alergias a los gatos?
Los síntomas de una alergia a un gato pueden desarrollarse en solo unos minutos o tardar horas en aparecer e incluyen:
- Tos
- Urticaria o una erupción en el pecho y la cara
- Ojos rojos
- Enrojecimiento de la piel donde un gato te rascó, mordió o lamió
- Congestión nasal con picazón
- Estornudos
Si no estás seguro de que padezcas una alergia a los gatos, puedes solicitar una prueba de alergia. Esto implica una prueba con parche cutáneo o de sangre.
¿Qué pasa si eres alérgico a un gato?
Si concluyes que los gatos son la causa de tus ojos rojos, de los picazones y los estornudos, no significa que no puedas volver a acercarte a uno. Sin embargo, significa que si introduces un gato en tu propia casa, este debería ser un gato hipoalergénico.
Se sabe que los gatos hipoalergénicos producen menos alérgenos que los gatos “normales”. Ten en cuenta que la palabra que utilizo es “menos”: ningún gato es al cien por cien hipoalergénico.
Los gatos hipoalergénicos producen menos proteína Fel D1, lo que hace que la reacción alérgica sea menos probable. Dentro de los gatitos hipoalergénicos los de color claro producen la menor cantidad.
1. Gato Balinés
El gato Balinés es muy similar al gato Siamés pero su cabello es más largo y ligeramente más suave. Estos gatos tampoco son tan vocales como los siameses.
La coloración del gato Balinés es similar a la de los siameses e incluye beige, chocolate, azul y lila y tienen llamativos ojos azules.
El Balinés es un gato amigable y tranquilo. No son tan fuertes como los siameses ni tan vocales. Estos gatos disfrutan de la compañía de personas y no les gusta que los dejen solos durante largos períodos de tiempo. A menudo te seguirán de habitación en habitación disfrutando de tu compañía.
2. Gato Javanés
Al igual que los Cornish Rex y Devon Rex, los gatos Javaneses solo tienen una de las tres capas de pelaje que tienen la mayoría de los gatos. La diferencia está en que los gatos Javaneses tienen una fina capa superior en lugar de una capa inferior. Tener solo una capa significa menos pelo, con ello menos desprendimiento, lo que supone menos caspa flotando alrededor de tu casa.
El gato Javanés es una raza en la línea de gatos de estilo Siamés que incluye al Balinés, Colorpoint Shorthair, Oriental Shorthair y Oriental Longhair. Les gusta ser “útiles” y te siguen a donde quiera que vayas y es probable que se cuele en tu cama a la mínima. Aunque no es tan “hablador” como el Siamés, el Javanés sigue siendo igual de obstinado y te dirá exactamente lo que piensa.